La libreta...

Como ya lo saben, soy un escritor aficionado. Durante esos momentos de inspiracion me gusta plasmar mis ideas en una libreta. No se por que no soy tan bueno escribiendo en la computadora. Cuando se trata de escribir obras de teatro (o mini-obras, que es lo que mas he escrito) me siento agusto con la computadora. Digamos que me gusta esa oportunidad de cambiar las cosas rapidamente. Pero cuando escribo poemas o cuentos me resulta dificil hacerlo frente al monitor. Es como si la inspiracion necesaria para crear este tipo de escritos emanara del papel. No podria explicarlo, pero asi sucede. Una vez que el poema ha quedado plasmado en papel, es muy facil pasar la tinta a la computadora.

Por eso es tan importante para mi tener mi libreta a la mano. Bueno, de hecho son dos. Una vieja libreta donde tengo bosquejos de mil ideas, desde obras de teatro que vieron su culminacion en mi laptop hasta pedazos de canciones que siguen esperando por su musica. La otra es una pequeña libreta de pasta azul, en la cual tengo escritos mis mejores poemas. Y cuando digo "mis mejores poemas" me refiero a aquellos que estan en un proceso de evolucion mas avanzado. Son aquellos que me gustan en este momento, y que aunque estan en espera de mejoras, pueden ser presentados con confianza. Es mas, algunos de ellos han aparecido en este espacio, dentro de mi serie "Poesia para nada". Y precisamente esta libreta es de la quiero hablar en este espacio.

Hace un par de dias comence a generar algunas ideas en mi cabeza, y teniendo la intencion de plasmarlas, busque mi libreta azul en el lugar donde siempre la tengo guardada. Para mi sorpresa el lugar estaba vacio. Como no contaba con mucho tiempo en ese momento, decidi dejar la busqueda de la libreta para el dia siguiente. Mientras tanto mi cabeza hacia un recorrido imaginario por mi habitacion buscando la libreta. El dia siguiente llego y los lugares que habian sido mentalmente marcados eran ahora fisicamente registrados. Nada de la libreta. Eso comenzo a generar algo de preocupacion en este que escribe. Y el dia de ayer ya no pude mas. En cuanto tuve oportunidad de dedicarme a buscar, eso hice. Movi libros (que cada vez son mas en esta habitacion), peliculas, cd's, revistas y demas, y encontre de todo, menos la libreta.

Ya entrada la madrugada comence a pensar en lugares menos probables. Y bajo una pila de libros que uso para el trabajo ahi estaba, escondida, mi querida libreta azul. El simple hecho de haberla encontrado fue suficiente para asegurarme una buena noche de sueño. Claro esta, no me dormi hasta checar el contenido de la libreta, asegurandome que todo lo que tenia escrito siguiera ahi. Y ahora que la libreta ha regresado a su lugar habitual puedo seguir adelante. Algo me dice que esta semana sera interesante. Solo el tiempo lo podra confirmar.

Saludos

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