jueves, septiembre 02, 2010

Dana Rucker (parte 2)

Seguimos con un poco de la historia de Dana Rucker, el grupo de rock que habita dentro de este [Cerebro en Renta].

La 'sala de espera' (parte 2)

La voz de John me regresa al ‘camerino’. No entendí (o más bien no escuche) lo que me dijo, pero mi movimiento de cabeza afirmativo lo dejó contento. Y ahora recuerdo por qué inicie ese viaje mental, no se como llamar a este cuarto. Demonios, todo lo que me puse a pensar por algo tan sencillo. Pero bueno, no es un ‘camerino’ porque no soy actor, es más, nunca he tenido en claro que significa la palabra. Tampoco es un ‘vestidor’ porque no me visto ahí; ninguno de nosotros lo hace. Ahora que lo pienso, es como una ‘sala de espera’: igual a las que hay en hospitales, consultorios médicos, estaciones de camión, etc. donde uno se sienta a ver pasar los minutos previos a que comience lo que uno fue a hacer. Y viendo a mis amigos, no hay mucha diferencia. Chris esta leyendo uno de los miles de libros que lee, como el paciente que espera a su doctor. Erik va de aquí para allá con su botella de agua, dando la misma imagen de un padre que espera fuera del quirófano la llegada de su hijo. No se por que es tan impaciente, pero lo es. Y John esta con su libreta en la mano, escribiendo una de sus ideas para una canción. Bien podríamos confundirlo con el novio impaciente que esta en el aeropuerto, pues su novia llega de vacaciones y él fue a esperarla. Y mientras espera le escribe algo, una carta o un poema, según le de la inspiración. Que en el caso de John no es mucha diferencia. He leido por un buen tiempo lo que escribe, y hasta los mensajes que deja pegados en el refrigerador tienen rima. Luego hablaré un poco más del talento innato de nuestro vocalista. El punto es que todos lucimos como si esperáramos algo, como si nuestro ‘vestidor’ fuera una sala de espera, y el público fuera un gigantesco doctor que esta a punto de consultarnos.

Otra vez me perdí en mis ideas. Y lo que me regresó a la realidad esta vez fue percibir el movimiento de los demás. Fue cuando me di cuenta que el ‘doctor’ estaba listo para recibirnos. Aquí vamos. Que alguien más espere, pues por el próximo par de horas el psicoanalista que es nuestro público escuchará lo que Dana Rucker tiene que decir.

[otro poco] [Dana Rucker]

2 comentarios:

Lim dijo...

La impaciencia del que espera, ese calor y apoyo del público, para el que actúa, tiene que ser indescriptible, esos nervios, que te sobrecogen y te envuelven, para poder hacer la actuación de tu vida.
Espero con éxito el estreno de Dana Rucker.
Un abrazo amigo.

Recomenzar dijo...

Buen texto lleno de emociones